atencion@aperat.org
En Chile Francisco había declarado, poco antes de llegar al Perú, que no había tomado medidas drásticas contra los sacerdotes involucrados en el caso karadima (como Juan Barros) por no haber “suficientes pruebas”.
Uno de nuestros colaboradores prestó su departamento ubicado en frente de la iglesia las nazarenas para colgar la gigantografía y decirle al Papa que “Aquí si hay pruebas", haciendo referencia al caso Sodalicio.
Nuestro cartel ocupó las primera planas de ese día, como una muestra de que en el Perú hay unos pocos valientes que se atreven a enfrentarse al enorme poder de la Iglesia Católica y a un estado completamente servil a ella.